Depresión
La depresión es un trastorno del estado de ánimo en el cual sus síntomas habituales son, infelicidad, abatimiento, tristeza, ira, culpa o frustración de forma que interfieren con la vida cotidiana en un periodo de tiempo considerable. Los síntomas de la depresión son muy sencillos de identificar, pero son unos síntomas muy compartidos por otras enfermedades mentales, por lo que en ocasiones pueden llevar a confusión.
Por otro lado también la depresión se tiende a generalizar o normalizar, dentro de nuestro vocabulario, por lo que es frecuente escuchar que uno u otro tiene depresión, cuando posiblemente estemos hablando de que está triste, o lleva unos días bajo de ánimos. Por ello aquí os especificamos de forma detallada cuáles son los síntomas de la depresión.
Principales síntomas
La sintomatología de la depresión abarca desde:
- Llanto con frecuencia sin motivo aparente.
- Falta de motivación o de iniciativa para hacer actividades.
- Pérdida de interés en actividades que anteriormente resultaban agradables.
- Pérdida de la capacidad de disfrutar con las actividades.
- Sensación de cansancio constante.
- Alteraciones en el peso, pérdida, o ganancia.
- Problemas de sueño. Generalmente con despertares nocturnos.
- Somnolencia diurna, haciendo que la persona esté demasiado tiempo en cama.
- Sentimientos de ira, frustración y culpa.
- Sentimientos recurrentes de incapacidad.
- Auto devaluación de uno mismo, con muy baja autoestima
- Disminución de la capacidad intelectual.
- Pensamientos catastrofistas acerca del futuro.
- Pensamientos recurrentes sobre la muerte o ideas de suicidio.
Para ser diagnosticada clínicamente los síntomas de la depresión se deben prolongar al menos durante dos semanas y no deben poder ser explicables por un consumo de sustancias.
De la misma manera, hay que tener un especial cuidado con los procesos de duelo por pérdida de un ser querido, ya que toda esta sintomatología puede ser explicada por la pérdida, y en estos casos lo aconsejable es dejar que la persona realice su proceso de duelo. Si esta sintomatología perdurase más de seis meses, entonces sí sería momento de consultar con un psicólogo especialista.